Cincuenta años



Hay quien piensa -- ¡el pensamiento conservador! -- que en cincuenta años apenas cambia la vida, que permanece casi idéntica a como la conocimos entonces. 

En cincuenta años la literatura ha pasado de ocupar un lugar preponderante en la vida a ser simplemente un objeto de consumo. Hay quien se lamenta de ello. A mí me alegra porque ya apenas quedan clérigos en ella.